Ya sean compras semanales o quincenales, el realizar “El súper” implica tomar decisiones que se adapten a tu estilo de vida y a tu presupuesto, por ello en ocasiones se deja uno llevar y en un segundo terminas con el carrito lleno de cosas que por ser baratas o prácticas son tu primera opción, pero no precisamente lo más sano, ante todo recuerda que lo barato sale caro por lo que las dos reglas básicas para comprar tu despensa son: “Cuida tu bolsillo y cuida tu salud”
Te presento los pasos para realizar tus compras sin gastar mucho dinero y conservar un estilo de vida saludable.
- Planifica qué cocinarás y para cuántas personas… Una gran alternativa es cocinar tus alimentos para toda la semana en caso de que no cuentes con mucho tiempo o bien planear un menú semanal para organizar cantidades y evitar comprar de más o que te sobre comida.
- Revisa lo que tienes en tu alacena y refrigerador para no comprarlo nuevamente… Si ya tienes atún en la alacena no compres más latas, de esta manera puedes invertir ese dinero en alimentos nuevos lo que implica preparaciones diferentes para salir de la rutina.
- Elabora una lista que lleve la relación con tu menú semanal… Una vez elaborado tu plan semanal (PASO 1) y revisado lo que tienes en tu alacena y refrigerador (PASO 2) puedes proceder a elaborar tu lista de compras, incluye de primera instancia frutas y verduras, procura comprar estas de manera semanal para que no se te echen a perder y toma en cuenta las cantidades aproximadas que utilizarás para toda la semana. Tu lista debe incluir frutas y verduras de diversos colores, lácteos bajos en grasa, productos de origen animal o carnes bajos en grasa (MAGROS), leguminosas y cereales de preferencia integral y no olvides los condimentos y especias necesarios para la preparación de tus alimentos.
- Come bien antes de realizar tus compras… Un error muy común en el que todos caemos es ir hambrientos al súper con la intención de comprar lo necesario para nuestra siguiente comida, sin embargo, al ir con hambre nuestro carrito termina lleno pero un 30% del carrito no era precisamente lo que llevabas en la lista, al tener hambre optas por papas, galletas, barritas y alimentos tipo snack para entretener tu apetito y por lo tanto comes mal y gastas más. Te recomiendo tomar una colación como fruta, yogurt o bien realizar una comida completa antes de ir por tus compras.
- No ir cansado o con prisa… Otro error común, si lo que intentas es mejorar tu alimentación debes ir con la mentalidad para realizar un cambio en tu alacena, por lo que si vas corriendo o demasiado cansado optarás por los alimentos más fáciles, las versiones instantáneas y definitivamente te brincarás el pasillo de frutas y verduras, tu cerebro pide descanso o te indica que no tienes tiempo para ponerte a pensar y elegir adecuadamente, por lo que de nuevo tu carrito termina con alimentos poco saludables.
- Una vez descansado, sin hambre y con lista en mano ¡vámonos de compras! Comienza por los productos industrializados, continúa con las frutas y verduras y finaliza con los refrigerados y congelados, evita colocar las carnes o pescados crudos sobre otros alimentos ya que pueden gotear y contaminar el resto.Compra lo justo, verifica las fechas de caducidad, revisa los alimentos (por ejemplo, pan libre de moho, latas sin golpes o abolladuras y empaques sellados.
- Un poco de lectura y revisión… Este paso es clave para lograr con éxito que tus compras sean saludables, en todos los productos industrializados procura dar lectura a las etiquetas de información nutricional, revisa el tamaño de la porción, la cantidad de azúcar y grasas; así mismo revisa la lista de ingredientes, recuerda que en un producto se enlistan de mayor a menor en su contenido general, por lo tanto, si el producto que adquieres tiene como primer lugar de la lista de ingredientes azúcar, definitivamente no es la opción más saludable, lo mejor será descartarlo y buscar una nueva.
“Revisa los precios y las ofertas disponibles de los alimentos que se encuentran en tu lista, de esta manera continuas ahorrando”
- Elige las opciones de productos sencillos en su versión original… Un claro ejemplo de esto es el cereal de caja, ya que encuentras el cereal con frutos rojos, con chocolate, con miel, entre muchos otros; pero lo mejor es elegir su versión original del producto, de ésta manera garantizas un menor consumo de conservadores, químicos y azúcares o grasas extras.
- Si vas por una compra pequeña, usa un carro pequeño… De ésta manera evitas atascar el carrito de cosas innecesarias y sobretodo fuera de tu lista.
- Sé realista… Compra alimentos que en verdad vayas a consumir y tengas la intención de preparar. Por ejemplo, si eres práctico y con poco tiempo para cocinar no compres arroz si no tienes tiempo para prepararlo o peor aún si no sabes cómo, mejor compra tostadas horneadas o un poco de pan integral para acompañar tus alimentos.
- Intenta algo nuevo… Este paso va de la mano con el anterior, continuando con el ejemplo, si eres realista pero quieres aprender a preparar el arroz, busca un espacio en tu agenda para experimentar en la cocina, puedes buscar alguna receta, preguntarle a tu mamá, tía o vecina e incluso revisar algún tutorial por internet que te guíe en la experiencia de cocinar algo nuevo, créeme quedarás muy satisfecho con los logros obtenidos.
- Haz una revisión final… Una vez finalizadas tus compras, revisa que tu lista se encuentre completa, que no hayas añadido nada fuera de ella y que vaya acorde a tu menú semanal.
Para concluir, evita caer en tentaciones, ya que no solo te saldrás de tu presupuesto, sino que también pueden alejarte de tu objetivo de llevar una alimentación saludable.
Tipo de publicación: Artículos comentados
Referencias bibliográficas
- http://www.uwhealth.org/spanishhealth/topic/actionset/alimentaci %C3%B3n-saludable-c%C3%B3mo-tomar-decisiones-saludables-cuando-hace-compras/uz2171.html
- http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/patientinstructions/000336.htm
- https://www.insk.com/articulos/preguntale-al-experto/tips-para-hacer-compras-inteligentes/
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